Capítulo 02
No alcanzó ni a rozar su mejilla, ya que aplaqué el golpe y fruncí
el ceño bastante enfurecido por el desagradable ambiente que había generado su
presencia. Los dos nos observamos agresivamente y apretamos los dientes, no iba
a soltarle bajo ningún concepto.
-Kazuya, ¿y este tipo…? –profirió una ligera risotada,
tornando después aquella mueca a una mucho más siniestra –veo que no pierdes el
tiempo…